
Campaña limpia, sin descalificaciones, y medidas por la familia y contra la miseria, pidió el Cardenal Errázuriz. Los 5 postulantes a La Moneda estaban en la Catedral.
18 de septiembre, 2009
El año electoral marcó de manera central el mensaje leído por el Cardenal arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, en el Te Deum ecuménico por la Independencia de Chile celebrado esta viernes en la Catedral Metropolitana de Santiago.
La ceremonia tuvo especial simbolismo al considerarse que este 18 de septiembre significa el inicio de la cuenta regresiva para los festejos del bicentenario de la patria, en 2010, y por tratarse de la última con Michelle Bachelet en el cargo de Presidenta.
En sus palabras, Monseñor Errázuriz abogó este viernes para que ante la proximidad de los comicios electorales, se genere una campaña limpia, en la que no se vean atisbos de confrontaciones ni descalificaciones.
"Muy pronto ocurrirá la renovación de un gran número de servidores públicos, tanto en el Supremo Gobierno del país como en el Parlamento”, señaló el prelado dirigiéndose a los 5 candidatos presidenciales, todos los cuales estaban presentes.
"Queremos una contienda política de cielos despejados, en la cual los candidatos expongan sus programas con sincera transparencia y con realismo, y no desacrediten a la persona de sus adversarios”, agregó.
Para la Iglesia Católica, “despertar pasiones y rechazos a través de descalificaciones no es un signo de nobleza personal ni de confianza en el pueblo, al cual debemos considerarlo capaz de optar serenamente en vista de los méritos y los programas reales de quienes postulan a los diversos cargos”.
“Abstenerse de descalificaciones personales es una promesa de colaboración, desde el gobierno o desde la oposición, con quienes sean elegidos, a los que no se quiere denigrar, sino respetar y apreciar antes y después de la elección", agregó.
Contra tendencias antinatalistas y la miseria
Errázuriz también se explayó respecto de lo que espera la Iglesia Católica de Chile en las propuestas programáticas de los candidatos, destacando temas valóricos y el combate a la pobreza.
Abogó por “la promoción de la alianza matrimonial, que une a un hombre y una mujer, y de la familia que de ella nace, como asimismo el respeto a la vida desde la concepción, pasando por todas las etapas de su desarrollo, hasta la muerte natural”.
Pidió promover “políticas públicas (…) favorables a la vida de las familias y al aumento de la natalidad en ellas, en el país con la tasa de fecundidad más baja de Centro y Sudamérica, con las peligrosas consecuencias que surgen de las tendencias antinatalistas”.
En cuanto a la pobreza, llamó a los postulantes a La Moneda a “nos revelen su compromiso resuelto y sus planes para superar la miseria, y para fomentar vigorosamente el desarrollo humano y económico, a fin de acortar eficazmente la hiriente brecha que distancia los ingresos de los chilenos”.
El Cardenal enfatizó que "con sumo interés esperamos la publicación de sus proyectos y programas de gobierno” para “conocerlos también en otras materias impostergables”.
Aquí destacó, entre otras, a la seguridad ciudadana, "la educación realmente integral y de calidad", la salud pública, la superación de la droga y "la rehabilitación de los encarcelados y la dignificación de los recintos penitenciarios”.
También se refirió a los pueblos indígenas señalando el interés por conocer “los planes para impulsar la originalidad cultural de los pueblos autóctonos, para fomentar la fraternidad con ellos, y para aumentar las oportunidades que redunden en su bien y que busquen el progreso y la paz, en base a la justicia y la equidad”.

“Deseamos escucharlos sobre la sustentabilidad del desarrollo y el respeto a la naturaleza. A todos nos importa el aire, los ríos, la tierra y el mar, como también todo organismo viviente, porque queremos que nos sean útiles, conservando el equilibrio que Dios estableció como Creador”, apuntó.
Fuente: http://www.lanacion.cl/mensaje-a-candidatos-marco-simbolico-te-deum/noticias/2009-09-18/124719.html
E-MAIL sancarlosnoticias@hotmail.com
La ceremonia tuvo especial simbolismo al considerarse que este 18 de septiembre significa el inicio de la cuenta regresiva para los festejos del bicentenario de la patria, en 2010, y por tratarse de la última con Michelle Bachelet en el cargo de Presidenta.
En sus palabras, Monseñor Errázuriz abogó este viernes para que ante la proximidad de los comicios electorales, se genere una campaña limpia, en la que no se vean atisbos de confrontaciones ni descalificaciones.
"Muy pronto ocurrirá la renovación de un gran número de servidores públicos, tanto en el Supremo Gobierno del país como en el Parlamento”, señaló el prelado dirigiéndose a los 5 candidatos presidenciales, todos los cuales estaban presentes.
"Queremos una contienda política de cielos despejados, en la cual los candidatos expongan sus programas con sincera transparencia y con realismo, y no desacrediten a la persona de sus adversarios”, agregó.
Para la Iglesia Católica, “despertar pasiones y rechazos a través de descalificaciones no es un signo de nobleza personal ni de confianza en el pueblo, al cual debemos considerarlo capaz de optar serenamente en vista de los méritos y los programas reales de quienes postulan a los diversos cargos”.
“Abstenerse de descalificaciones personales es una promesa de colaboración, desde el gobierno o desde la oposición, con quienes sean elegidos, a los que no se quiere denigrar, sino respetar y apreciar antes y después de la elección", agregó.
Contra tendencias antinatalistas y la miseria
Errázuriz también se explayó respecto de lo que espera la Iglesia Católica de Chile en las propuestas programáticas de los candidatos, destacando temas valóricos y el combate a la pobreza.
Abogó por “la promoción de la alianza matrimonial, que une a un hombre y una mujer, y de la familia que de ella nace, como asimismo el respeto a la vida desde la concepción, pasando por todas las etapas de su desarrollo, hasta la muerte natural”.
Pidió promover “políticas públicas (…) favorables a la vida de las familias y al aumento de la natalidad en ellas, en el país con la tasa de fecundidad más baja de Centro y Sudamérica, con las peligrosas consecuencias que surgen de las tendencias antinatalistas”.
En cuanto a la pobreza, llamó a los postulantes a La Moneda a “nos revelen su compromiso resuelto y sus planes para superar la miseria, y para fomentar vigorosamente el desarrollo humano y económico, a fin de acortar eficazmente la hiriente brecha que distancia los ingresos de los chilenos”.
El Cardenal enfatizó que "con sumo interés esperamos la publicación de sus proyectos y programas de gobierno” para “conocerlos también en otras materias impostergables”.
Aquí destacó, entre otras, a la seguridad ciudadana, "la educación realmente integral y de calidad", la salud pública, la superación de la droga y "la rehabilitación de los encarcelados y la dignificación de los recintos penitenciarios”.
También se refirió a los pueblos indígenas señalando el interés por conocer “los planes para impulsar la originalidad cultural de los pueblos autóctonos, para fomentar la fraternidad con ellos, y para aumentar las oportunidades que redunden en su bien y que busquen el progreso y la paz, en base a la justicia y la equidad”.

“Deseamos escucharlos sobre la sustentabilidad del desarrollo y el respeto a la naturaleza. A todos nos importa el aire, los ríos, la tierra y el mar, como también todo organismo viviente, porque queremos que nos sean útiles, conservando el equilibrio que Dios estableció como Creador”, apuntó.
Fuente: http://www.lanacion.cl/mensaje-a-candidatos-marco-simbolico-te-deum/noticias/2009-09-18/124719.html
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